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Haciendo una analogía con el mundo de la construcción, antes de levantar un edificio, siempre hay un ingeniero estructural en la fase de diseño, que se encarga de calcular y definir las bases necesarias para la obra.
Es una práctica no solo lógica, sino fundamental: no puedes construir una casa o un edificio sin tener en cuenta su arquitectura o la solidez de su estructura. Cada necesidad de construcción requiere soluciones arquitectónicas específicas.
Y aquí nace mi reflexión: ¿por qué en el mundo del desarrollo de software este enfoque no está tan extendido? Y, cuando ocurre, ¿por qué la planificación arquitectónica no se analiza siempre con la profundidad que merece?
En nuestro sector, la figura equivalente al ingeniero estructural es el Software Architect, un rol que, en muchos contextos, parece casi pertenecer a una leyenda.
La figura del Architect en el mundo real
Según mi experiencia de unos ocho años en el sector, he notado que esta figura a menudo está ausente. En la mayoría de los proyectos en los que he participado, el rol del arquitecto era asumido, cuando era necesario, por los miembros más senior del equipo de desarrollo. Sin embargo, existe una diferencia sustancial: el Software Architect no es simplemente un desarrollador experimentado, sino una persona con un know-how extenso y profundo sobre arquitecturas de software.
El rol del Software Architect: competencias y responsabilidades
El Software Architect es el profesional responsable de diseñar la arquitectura de un sistema software, garantizando que sea robusta, escalable y adecuada a las necesidades actuales y futuras del proyecto. Es una figura estratégica que combina competencias técnicas avanzadas con una visión global de los procesos empresariales y de las necesidades del cliente.
Debe poseer un vasto conocimiento técnico, que incluye:
- Conocimiento de arquitecturas de software: Microservicios, monolíticas, serverless, event-driven, SOA, etc.
- Diseño y modelado: Capacidad para definir diagramas de arquitectura, como UML o C4, para describir la estructura del sistema.
- Tecnologías y lenguajes: Experiencia práctica con lenguajes de programación (por ejemplo, Java, Python, JavaScript, etc.) y frameworks, para evaluar y elegir los más adecuados para el proyecto.
- Bases de datos y almacenamiento: Conocimiento profundo de bases de datos relacionales (ej. PostgreSQL, MySQL) y no relacionales (ej. MongoDB, DynamoDB), así como de soluciones de almacenamiento distribuido.
- Cloud computing: Experiencia con servicios en la nube (AWS, Azure, Google Cloud) y contenedores (Docker, Kubernetes), fundamentales en los proyectos modernos.
- Patrones arquitectónicos: Familiaridad con patrones de diseño como CQRS, Event Sourcing, Repository Pattern, Singleton, etc.
- Escalabilidad y rendimiento: Capacidad para diseñar sistemas que soporten cargas altas, utilizando técnicas como el balanceo de carga y el caching distribuido.
Responsabilidades principales y soft skills
El Software Architect tiene un papel crucial en cada fase del proyecto:
- Definición de la arquitectura: Analizar los requisitos del proyecto y diseñar la estructura de software eligiendo la arquitectura más adecuada.
- Selección de tecnologías: Evaluar frameworks y herramientas para garantizar escalabilidad y mantenibilidad.
- Alineación con el negocio: Colaborar con los stakeholders para garantizar que la arquitectura cumpla con los objetivos empresariales.
- Apoyo al equipo de desarrollo: Proveer directrices, resolver problemas complejos y fomentar buenas prácticas.
- Gestión de compromisos: Balancear calidad, velocidad de desarrollo y riesgos tecnológicos.
- Evolución de la arquitectura: Monitorear y actualizar la arquitectura para adaptarla a las necesidades cambiantes.
- Comunicación efectiva: Explicar conceptos complejos tanto a técnicos como a no técnicos.
- Liderazgo: Guiar al equipo en las decisiones técnicas y motivarlo hacia objetivos comunes.
- Solución de problemas: Enfrentar desafíos complejos de manera rápida y estratégica.
El diseño: un momento crucial
La fase de diseño, que incluye la elección de tecnologías y la arquitectura, es un momento clave en el desarrollo de un software. Las decisiones tomadas en esta fase pueden facilitar enormemente no solo el desarrollo, sino también el funcionamiento, la evolución y el mantenimiento del producto.
A pesar de la importancia estratégica de esta figura, me pregunto: ¿por qué el Software Architect es tan raro en los equipos, incluso en las grandes consultoras?
¿Un costo o una inversión? A la luz de todas estas reflexiones, ¿será que su ausencia en los equipos de desarrollo se debe a un problema presupuestario?
Entonces, ¿es el Software Architect un costo o una inversión?
Porque es indispensable
Podríamos decir que no es un costo, sino una inversión:
- Previene errores estructurales: Un diseño sólido reduce la probabilidad de problemas técnicos a largo plazo.
- Acelera el desarrollo: Proporciona una base clara y bien definida, reduciendo el esfuerzo de coordinación del equipo.
- Garantiza escalabilidad: Permite crear software que crezca con las necesidades del negocio, sin tener que rediseñarlo desde cero.
- Reduce costos: Las decisiones arquitectónicas bien pensadas evitan gastos adicionales en mantenimiento y rediseño.
Sin embargo, comprendo que para una empresa, tener un Software Architect en cada proyecto puede representar un costo significativo. Sin embargo, una posible solución podría ser la de introducir un número limitado de arquitectos dedicados, distribuidos entre las unidades de negocio, de manera que puedan supervisar y apoyar varios proyectos simultáneamente. Este enfoque no solo reduciría costos, sino que garantizaría un nivel más alto de calidad y coherencia en las soluciones de diseño.
¿El Software Developer, un Software Architect dentro de sí mismo?
En muchas empresas, especialmente las de tamaño medio y pequeño, tener un arquitecto dedicado para cada proyecto es insostenible. La solución podría ser formar a los Software Developers para que adquieran un conocimiento lo suficientemente profundo en arquitectura, sin necesariamente transformarlos en arquitectos. Este enfoque permitiría que los desarrolladores tomaran decisiones de diseño más informadas, mitigando la ausencia de una figura dedicada.
¿Y qué cambiaría frente a delegar el diseño a los senior del equipo?
No siempre ser senior significa tener conocimientos de soluciones arquitectónicas o de diversas tecnologías, por lo que hace falta un verdadero enfoque en esta área.
Conclusión: el Software Architect hoy y mañana
En conclusión, parece que esta figura realmente es mitológica.
Pero tal vez la verdadera pregunta sea: ¿los equipos realmente necesitan un Software Architect dedicado? Si hoy la situación es esta, ¿qué ocurrirá mañana, con la inteligencia artificial en el horizonte? ¿Cuál será el futuro de nuestro querido amigo?
Y ustedes, ¿qué piensan al respecto?
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